Una de las atracciones imprescindibles de Bergen es el funicular que sube al mirador del monte Fløyen. El funicular que sube al mirador del monte Fløyen se llama Fløibanen, y te planta cómoda y rápidamente en una terraza a 320 metros de altura que ofrece una de las mejores panorámicas de la segunda ciudad más grande de Noruega. ¿Merece la pena subir a este mirador? Sí, merece la pena, y es una de las cosas que deberías hacer cuando visites Bergen, con o sin funicular. Para que puedas hacerlo de la manera más eficiente posible, sin perder tiempo ni dinero, en este artículo te cuento todo lo que necesitas saber para disfrutar del monte Fløyen y su funicular, con la experiencia de quien ha vivido en la ciudad y ha visto a infinidad de turistas perder el día y la paciencia en su cola.

Bergen es la ciudad de las siete montañas y Fløyen es una de ellas, concretamente la que tiene el acceso más fácil desde el centro. Gracias al Fløibanen (que literalmente significa el tren de Fløyen, aunque en realidad es un funicular), en pocos minutos subirás de cero a 320 metros para disfrutar de una de las vistas más hermosas de Bergen. Si la lluvia lo permite, por supuesto.

Ojo con la lluvia porque Bergen es la ciudad de la lluvia en Noruega, así que ahí va el primer consejo: si puedes ver estación superior del funicular desde abajo, podrás disfrutar de las vistas desde arriba. No tomes el funicular si no ves la estación superior desde la estación inferior, salvo que quieras disfrutar un bonito mar de nubes. En el caso de que subas al mirador y no veas nada espera. Generalmente, aunque el cielo esté cubierto de nubes, si se espera un rato en el mirador en algún momento tendrás oportunidad de disfrutar de la vista, aunque sea solo por un segundo. En el peor de los casos, en temporada turística tendrás una tienda de regalos, una cafetería y unos soportales con WIFI para cobijarte de las inclemencias del tiempo mientras cruzas los dedos y esperas que abra la vista.

LA MEJOR FORMA DE SUBIR A FLØYEN

Para mi, la mejor forma de subir a Fløyen es subir en Fløibanen (el funicular) y bajar andando (si no hace un tiempo infernal). Así tendrás la experiencia funicular (la verdad es que el funicular es bonito), la vista del mirador (que, para mi gusto, es la mejor de la ciudad porque puedes distinguir muy bien los edificios, los puertos, etc.), y la experiencia senderismo (el senderismo es algo muy noruego y muy importante para la ciudad de Bergen). Si decides bajar andando del monte Fløyen espera un camino bien señalizado y muy urbano dentro de que es el monte, sencillo y fácil de hacer a no ser que tengas silla de ruedas. Aunque ojo, ¡los noruegos suben y bajan por aquí con los carritos de sus bebes sin ningún problema! Pero claro, ellos son noruegos y llevan toda la vida haciéndolo. Noruegos a parte, al subir en funicular y bajar andando te ahorrarás medio billete del Fløibanen. Si quieres saber qué esperar del viaje en funicular, en este enlace puedes ver un video del trayecto del funicular completo (de abajo a arriba).

Si no te apetece hacer senderismo, la opción es subir y bajar al mirador del monte Fløyen en funicular. Para un adulto, el viaje de ida y vuelta en el funicular del monte Fløyen cuesta o 95 o 125 coronas dependiendo de la época del año, 50 o 65 si el viaje es solo de ida. Los tickets para el Fløibanen pueden comprarse allí o por Internet antes de viajar a Bergen. Comprar los tickets del funicular del monte Fløyen por Internet es lo mejor que puedes hacer si no quieres comerte una cola de muerte. Puedes comprar los tickets del Fløibanen en este enlace y llevarlos en tu móvil o impresos en papel el día que vayas a utilizarlos.

SUBIR AL MONTE FLØYEN DESDE UN CRUCERO

¿Qué es eso de la cola del funicular del monte Fløyen? La cola del funicular del monte Fløyen es un monstruo que suele aparecer cuando se junta varios cruceros grandes en la ciudad (puedes ver aquí la lista de cruceros que van a llegar a Bergen. Si puedes, procura que tu visita no coincida con la llega de tres o cuatro cruceros al mismo tiempo y, si es así, vete a Fløyen a primera hora -antes de que lleguen los barcos- o a última -cuando ya se hayan ido-).

Los días de crucero, son tantas las personas que quieren subir en el funicular y tantos los billetes que se les venden que el funicular sencillamente no da a basto. En el caso de que no tengas billete, la cola que tendrás que esperar será eterna. En el caso de que tengas billete también será larga, pero un poco menos. Puedes llegar a perder medio día tranquilamente. Por eso, si tienes claro que quieres subir en funicular, mejor lleva el ticket comprado de casa. No ahorras dinero, pero si tiempo y disgustos.

Si visitas Bergen en crucero, subes a Fløyen por tu cuenta y cuando quieres bajar ves que la cola es más larga que un día sin pan, siempre puedes bajar del monte andando (estas a 320 metros, no a 7.000) y con el dinero que te has ahorrado de la excursión tomar un taxi hasta tu puerto (y seguramente aún estarás ahorrando dinero). Desconfía de quien te diga que si no compras una excursión no podrás subir al mirador del monte Floyen y llegar a tiempo para embarcar. Te está mintiendo. También piensa que si llevas tu ticket comprado eres mucho más flexible, más autónomo. En este caso puedes vigilar la cola y sumarte a ella cuando veas que es más pequeña, o madrugar pronto por la mañana antes que lleguen las excursiones organizadas para no tener que esperar.

Con ticket o sin él, recuerda que la cola del funicular para la gente con ticket es la de la derecha, si tienes billete comprado puedes ponerte en esa directamente. La cola para gente sin ticket es la de la izquierda, si no tienes billete comprado tienes que ponerte en esa cola. Estará indicado con un cartel a la entrada, compruébalo por si esto cambia. También que sepas que el túnel de espera tiene WIFI gratuito, para que estés entretenido mientras esperar tu turno.

No obstante, la forma gratuita y más noruega de disfrutar del mirador del monte Fløyen es subir y bajar andando. El camino que lleva a Fløyen está claramente indicado, tardarás menos de una hora en recorrerlo. Sale justo de detrás de la estación del funicular. Harás ejercicio, ahorrarás dinero y tendrás cero colas. ¡Todo son ventajas!

¿Qué es mejor: el funicular del monte Fløyen o el teleférico de Ulriken? Como todo, depende. El funicular del monte Fløyen sale del centro de la ciudad,  de su estación base a Bryggen y al mercado del pescado hay 5 minutos andando, 10 si vas a la pata coja. El teleférico de Ulriken se encuentra en las afueras de la ciudad, por lo que tendrás que tomar un autobús para llegar hasta él. Eso sí, el teleférico te lleva hasta la cima de Ulriken, que con 643 metros de altura es la más alta de las siete montañas de Bergen. El funicular es más barato que el teleférico y, por lo general, es más fácil disfrutar de la vista en Fløyen que en Ulriken porque en Fløyen puedes jugar más con las horas.

Quiero decir, si hace un mal día, puedes vigilar el mirador de Fløyen desde abajo mientras haces otra cosa y no desperdiciar el tiempo miserablemente. Si hace un mal día y vas a Ulriken, no hay opción a hacer otra cosa ni a vigilar nada porque alrededor de Ulriken no hay nada que hacer. Irás, subirás, pasarás allí una hora máximo y te bajarás. Si en esa hora no ha despejado, te quedas sin vista y sin aprovechar el tiempo. Yo, si solo tuviera un día en la ciudad, subiría al monte Fløyen seguro. Ulriken lo dejaría para cuando volvería con más tiempo. Asimismo, confieso que me gusta más la vista de Fløyen que la de Ulriken, pues es más cercana a la ciudad y se distinguen mucho mejor los edificios y monumentos emblemáticos.

Pero vamos, ¡tú haz lo que quieras! Si prefieres subir en el teleférico de Ulriken, puedes comprar los billetes en este enlace. En estos momentos, un billete de ida  y vuelta a Ulriken para un adulto cuesta 175 coronas. La vista de la foto que viene a continuación es la que tienes desde Ulriken si te sale un día de escándalo. Arriba hay un restaurante – cafetería (cerrada en invierno) para tomar un café o una cerveza y brindar por la vida.

ATARDECERES, HIELO, TROLS Y CABRAS

¿Quieres que tu visita al mirador del monte Fløyen sea perfecta? Sube al atardecer si el día acompaña (osea, si no está cayendo la del pulpo). Verás una puesta de sol preciosa sobre Bergen. ¿Se puede subir en invierno al monte Fløyen? Si, se puede subir a monte Fløyen en invierno. Eso sí, los horarios del funicular son más reducidos y andando conviene llevar unos escarpines de pinchitos para no resbalar con el posible hielo que seguramente haya. En invierno también es conveniente llevar provisiones (algo de comer y, sobre todo, algo calentito que beber), pues tanto la tienda de souvenires como la cafetería suelen estar cerradas.

¿Se puede hacer algo más en el monte Fløyen a parte de contemplar la vista desde el mirador? Sí, se puede. Puedes pasar a saludar a las cabras que allí arriba habitan. En el monte Fløyen hay unas cabras controladas por un collar eléctrico (ósea, que las cabras son libres siempre y cuando no intenten salir del perímetro que les marca su collar). Las encontrarás en la parte izquierda del mirador. Las cabras campan por allí a sus anchas y se comen siempre que pueden la merienda de los turistas. La cabra negra se llama Obama, y en su bautizo contó con el beneplácito del ex presidente de los Estados Unidos para ponerle ese nombre.

También en lo alto de Fløyen hay un lugar llamado bosque de los trols. Encontrarás el bosque de los trols un poco más arriba del mirador, a mano izquierda por el camino que sube hacia Rundemanen (dejando la guardería a mano derecha y la cafetería a la izquierda). El bosque de los trols son unas cuantas estatuas tipo totem de trols puestas entre unos arbolillos. No es gran cosa pero, ya que estás, le puedes echar un ojo. A mi personalmente el bosque de los trols no me dice nada y no perdería ni medio segundo buscándolo, pero si lo quieres ahí lo tienes.

Y, por supuesto, algo que puedes hacer desde Fløyen es una ruta de senderismo. Existen mil caminos y caminillos que te llevan más arriba en la montaña, a vistas y lagos, y que son transitables durante todo el año. En invierno con esquís de travesía, en verano perfectos para caminar. Uno de los más famosos es la subida a Rundamanen, pero también desde Fløyen puedes hacer un bonito camino hasta las escaleras de Stolzen. Hay muchas posibilidades. Investiga, prepárate bien, y, ¡a por ellas!

Por cierto, la foto que cierra este artículo es de enero de 2017. Como ves, se puede y merece la pena subir al mirador del monte Fløyen en invierno 😉