Para que cuando vayas a San Francisco no tengas problemas con tu alojamiento, ni económicos ni de seguridad, en este artículo te cuento dónde dormir barato y seguro en San Francisco. También cómo identificar las zonas ‘peligrosas’ y/o inseguras de la ciudad para que puedas evitarlas a la hora buscar hotel, hostel o apartamento. Te incluyo los alojamientos en los que yo dormí durante los 10 días que pasé en San Francisco a finales de 2019 (y que fueron Casa Loma Hotel, Green Tortoise Hostel San Francisco y Pacific Tradewinds Hostel) con su correspondiente opinión, puntos fuertes, puntos flojos y algunas fotos por si te son de utilidad.
Para terminar y por si te interesa, te cuento algunas cosas sobre los alquileres en San Francisco, sobre The Tenderloin (uno de sus barrios más chungos), y sobre la situación de la gente sin hogar en esta ciudad y en California. Una situación muy seria, muy triste, y que a mi me alucinó y me partió el corazón por igual. Cuántos homeless son, por qué están ahí, y como afecta esto a la urbe, a sus residentes y a sus visitantes. ¡Empezamos!
Al preparar mi viaje a San Francisco, mi mayor duda fue dónde dormir. Tenía dudas sobre dónde dormir exactamente por dos motivos: me habían dicho que en San Francisco el alojamiento es muy caro (¿me lo podría permitir?); y me habían dicho que la ciudad es muy peligrosa porque está llena de vagabundos (¿cómo qué la ciudad está llena de vagabundos?).
¡Ah! Y también me habían dicho que en San Francisco hace mucho frío hasta en verano (¡pero si San Francisco está en California! ¿Cómo va a hacer frío en verano en California?). Eso es lo que a mi me habían dicho de San Francisco. Como siempre, la gente exageraba, aunque cierto es que había una parte de verdad en sus palabras sobre el alojamiento, la seguridad y la situación de la gente sin hogar. Me explico.
Mejores alojamientos en el top 10 de mejores hoteles en San Francisco de Tripadvisor:
Es cierto que San Francisco es bastante caro (comparado con otros sitios del mundo y con EE.UU. mismo), pero es posible encontrar alojamiento económico en el centro en zonas seguras y agradables. Y también es cierto que en San Francisco hay mucha gente sin hogar que, sea o no peligrosa, solo verla ya da mucha sensación de inseguridad (a mi por lo menos).
Por desgracia, en San Francisco hay zonas -¡muy céntricas!- en las que no conviene dormir (o desde luego yo nunca dormiría) porque puede ser peligroso. O, si no peligroso, por lo menos dar mucho, mucho respeto. San Francisco tiene zonas a evitar para dormir. O, para ser más justa, San Francisco tiene zonas en las que yo nunca dormiría ni recomendaría a nadie dormir.
THE TENDERLOIN, EL BARRIO ‘PELIGROSO’ DE SAN FRANCISCO
Como cualquier gran ciudad de cualquier parte del mundo, San Francisco tiene barrios mejores, barrios peores, y barrios totalmente desaconsejables para alojarse al visitar la ciudad. Pero sin duda alguna, hay un barrio que se lleva la palma en cuestión de mala fama. Ese barrio está en el centro y lleva el nombre de The Tenderloin. Es totalmente desaconsejable dormir en un hotel o hostel en The Tenderloin. Yo nunca lo haría, por muy barato que fuera. Aunque fuera gratis.
Resumiendo mucho -y profundizando en ello al final del artículo, en la parte dedicada al problema de la gente sin hogar de San Francisco-, The Tenderloin es un barrio desaconsejable porque está lleno de gente sin hogar, gente con problemas de adición a las drogas (yonquis) y gente con problemas mentales, a veces y con frecuencia con las tres a la vez. En The Tenderloin hay delincuencia, pobreza y suciedad, y la mayoría de la gente -local y visitante- no se siente segura allí. Curiosamente, The Tenderloin está en el mismo centro de San Francisco. En el siguiente mapa puedes ver su extensión y límites:
Fíjate bien. ¿Ves como The Tenderloin está en el centro mismo de San Francisco? Se encuentra literalmente a tiro de piedra de Union Square y de Market Street. Sus calles más conflictivas son probablemente Eddy Street y Turk Street, aunque tampoco Hyde Street, Taylor Street ni Ellis Street ni sus alrededores resultan apetecibles.
En el siguiente mapa se ve con más detalle la parte más ‘profunda’ del Tenderloin. ¿Ves ahora lo cerquita que quedan tanto Union Square (el cuadro verde de la derecha) como la parte baja de Market Street? Cuando busques hoteles, hostales o apartamentos en San Francisco, te recomiendo encarecidamente evitar todos esos bloques rojos (y en realidad, también los que están inmediatamente a su alrededor).
Al final del artículo hablo sobre The Tenderloin, su historia y sobre qué está pasando ahí ahora mismo, pero resumiendo rápido, The Tenderloin es un barrio chungo que quiere convertirse en alternativo. Está haciendo todo lo que puede por mejorar su imagen y sus infraestructuras pero, de momento, no ha llegado donde quiere llegar. No es un Candem Town, ni un Lavapies. Yo nunca jamás me hospedaría ni recomendaría hospedarse en The Tenderloin, ni aunque la estancia fuera regalada.
¡! AVISO. Ojo con las calles en San Francisco porque son muy largas, kilométricas. Eddy Street y Turk Street pueden ser muy poco recomendables a su paso por The Tenderloin, pero pueden ser totalmente seguras a su paso por otro lugar. Lo mismo ocurre con muchas otras calles de la ciudad. Por eso, a la hora de reservar alojamiento seguro en San Francisco, lo importante no es que te fijes en el nombre de la calle sino en la zona de la ciudad en la que esté ubicado el alojamiento en el que te quieres hospedar.
Mejores alojamientos en el top 10 de mejores hoteles en San Francisco de Booking:
Otro barrio para evitar a la hora de buscar alojamiento en San Francisco para mi es Mission Distric. A Mission Distric se puede ir a pasar el día, a ver los graffitis, a comer tacos o a lo que te de la gana. No es el Bronx, pero tampoco es el Barrio de Salamanca. Yo no pasearía Mission Distric de noche, porque si ya de día vi alguna cosa que no me gustó y me llevé un par de gritos groseros simplemente por existir, de noche no lo quiero ni pensar.
No digo que sea peligroso, pero si que a mi me resultaría inseguro volver a casa sola por la noche estando en Mission District. Pero de día todo bien. De día vete a Mission District y disfruta de sus graffitis, sus taquerías y su ambiente latino sin miedo pero con discreción y sentido común.
Igual con la zona de Soma, que no creo que sea peligrosa pero que a mi no me dejó buen sabor de boca. Estuve paseando por Soma a las tres de la tarde y allí observé mucho espacio vacío y mucha gente sin hogar. También allí tuve un incidente con un tío que intentó cogerme por el cuello (creo que para besarme, pero no estoy muy segura porque me escapé muy rápido), así que mi recuerdo del Soma no es bueno. Puede ser que dentro de Soma haya zonas mejores y zonas peores. Desconozco tanto, pero digo esto porque igual que no me alojaría en The Tenderloin ni en Mission Distric, tampoco me alojaría en Soma. Me dio mala espina y, como te explico enseguida, hay otras zonas mejores para alojarse en San Francisco. Yo te informo, tu decides qué hacer con esta información 😉
Digo esto también porque la zona de Soma es bastante céntrica, y porque en Soma se encuentra el hostel más barato de San Francisco a día de hoy. El hostel más barato de San Francisco lleva por nombre European Hostel, cuesta 28 euros la noche, tiene una puntuación de 5,5, y unas críticas terribles, especialmente en lo que a limpieza se refiere. Te pongo la foto arriba para que lo puedas identificar. Yo no me quedaría aquí, por las críticas, por la zona, y por que por poco más puedes quedarte en un sitio mucho más bonito en una zona mucho mejor de la ciudad.
Y ahora que ya estás un poco ubicado y sabes dónde no conviene dormir en la ciudad, te cuento dónde sí dormir barato y seguro en San Francisco.
DÓNDE DORMIR BARATO Y SEGURO EN SAN FRANCISCO
Para dormir barato y seguro en San Francisco hay diferentes opciones. Yo tengo dos propuestas. En el caso de que quieras estar en el centro de San Francisco, cerca de Union Square y a una distancia razonable de las atracciones caminando o en transporte público, mi propuesta es hospedarte en North Beach, cerca de Little Italy y China Town (por donde está el Green Tortoise Hostel San Francisco). En el caso de que quieras estar cerca del centro pero no pegadito a Union Square, en un barrio típico con casita bajas y cuquis, tranvías, restaurantes, y donde se pueda aparcar el coche gratis con relativa comodidad, mi propuesta es la zona que rodea las famosas Painted Ladies donde vivían los Padres Forzosos (esto es, alrededor de Casa Loma Hotel).
Cualquiera de esas dos zonas me gustó mucho para dormir, por ellas me atrevería a caminar sola por la noche con bastante seguridad (dentro de que no me emociona ir por San Francisco sola de noche), y en ellas encontré alojamiento económico y agradable para descansar después de un día de aprovechar al máximo la ciudad. Te cuento con más detalle mi experiencia a continuación, con los puntos fuertes y flojos de cada alojamiento en mi opinión.
Green Tortoise Hostel San Francisco (desde 31€ noche, ¡sauna incluida!)
El Green Tortoise Hostel San Francisco está ubicado en North Beach, en los límites de China Town, muy cerca de la City Lights Bookstore, el Museo Beat, y el café Vesubio. A 10 minutos o menos caminando de Union Square, a un paseíto corto pero empinado de la Coit Tower, y a un paseito largo pero sin cuestas al Pier 21 y sus alegres focas. El Green Tortoise Hostel San Francisco ofrece camas en habitación compartida desde 31 euros con desayuno y sauna incluida. Te cuento más.
Este hostel es un hostel limpio, con un personal muy agradable, y grandes espacios comunes. El desayuno es un buffet libre a base de café, té, bagels (típicos panecillos estadounidenses que parecen donuts pero son panes), mantequilla de cacahuete, mermelada, mantequilla normal, yogurt, fruta y zumo. Si quieres también hay huevos, pero te los tienes que preparar tú mismo. La cocina es grande, está impecable y tiene cientos de utensilios para cocinar. En la nevera hay una zona para que puedas guardar tus víveres, y un cajón y una balda donde los huéspedes que se van dejan comida para los que vienen. Hay té y café gratis 24 horas al día, así como máquinas expendedoras de chocolatinas y otras guarrerías.
La sala común es enorme y está abierta día y noche. Durante toda la semana se organizan actividades para que los huéspedes que lo deseen se conozcan y puedan interactuar. Y, por si todo esto fuera poco, este hostel tiene una sauna. ¡Una sauna! Durante tu estancia puedes darte tantas saunas gratis como desees. Dime tú un plan más bueno, más bonito y más barato que darse una sauna incluida en el precio de tu habitación después de un largo día de exploración. Te deja como nueva.
La zona donde se encuentra este hostel es también muy segura. Es segura incluso si quieres salir por la noche, incluso sola (cosa que no me atreví a hacer en otras zonas de San Francisco). Como te digo, este hostel está en North Beach, muy cerca de China Town, una zona muy céntrica, muy segura, y muy barata en general; y a tiro de piedra (a menos de cinco minutos) de la librería City Lights de Lawrence Ferlinghetti, sin ninguna duda la librería más emblemática y alternativa de San Francisco (a mi me maravilló. ¡Cuánta literatura comprometida! ¡Cuánta poesía! Y, ¡qué bonita es!).
También está muy cerca del no menos emblemático bar Vesubio (el bar Vesubio es uno de los garitos donde los autores de la generación Beat se juntaban cuando estaban en San Francisco), un lugar perfecto y con mucha personalidad para tomarse una cerveza o una copa (o dos, o tres) sin dejar de conocer. Un local precioso, tipo taberna. Si quieres ir de fiesta, alrededor del hostel hay bares para ir de fiesta. También hay clubs de striptesse que nunca jamas recomendaría pero que no me dieron problema alguno.
Quizá lo que menos me gustó del Green Tortoise Hostel San Francisco fueron las habitaciones. Pero no es que no me gustarán las habitaciones en sí, es que me gustó más la sauna, la zona común y la ubicación. Las habitaciones son sencillas y limpias. Sin más. Yo dormí en una habitación con otras cuatro chicas. El colchón era decente y el edredón abrigaba. Dormí muy agustito. De hecho, todas las noches me daba una sauna y después me iba a dormir. Dormía como un tronco.
Dentro del cuarto había un pequeño lavabo con secador; y sobre cada una de las camas una luz personal y varios enchufes para poder recargar tus aparatos electrónicos. Para más seguridad, cada una de las chicas que estábamos en la habitación teníamos una taquilla grande en la que cabía una mochila o maleta de cabina. Como en muchos otros hostels, para usar esta taquilla era necesario llevar un candado de casa. ¡Y los baños! Había muchos baños repartidos por cada piso y, al menos siempre que yo los utilicé, estaban muy limpios. En la misma línea que el resto del hostel. El WIFI iba muy bien en cualquier punto del edificio.
¡! SOBRE EL GREEN TORTOISE HOSTEL SAN FRANCISCO. Este hostel me pareció de lo mejorcito en hostels que he visto últimamente. Tiene mucho espíritu de hostel, quiero decir, que aunque es un negocio -evidentemente- ayudan mucho al viajero. A mi, aunque el check in era a partir de las 16:00 horas -una hora normal en cualquier hostel u hotel de EE.UU.- me dejaron usar mucho antes el baño (¡y ducharme!), guardar la mochila y cocinar en los espacios comunes. Así mismo fueron supermajos conmigo en todo momento e intentaron ayudarme siempre en todo lo que necesité (desde comprar un sello hasta una recomendación gastronómica). A la gente que trabaja en este sitio, en atención y amabilidad, le pongo un 10.
Pacific Tradewinds Hostel (desde entre 40 / 50€ noche)
El Pacific Tradawinds Hostel es otra opción de alojamiento barato en el centro de San Francisco, en este caso, más cerca de Union Square que el Green Tortoise Hostel San Francisco. También este lugar es muy amigable y el personal que lo gestiona muy simpático, pero entre este y el anterior, me quedo mil veces con el anterior (con el Green Tortoise). Por precio (es más barato), por limpieza (está mucho más limpio), por servicios (es mucho más grande y las zonas comunes están mejor equipadas), y por ubicación (aunque este está más ‘centrico’, más cerca de Union Square; North Beach, la zona del otro, me parece más segura, más animada, más agradable y más interesante en general). Además, este no tiene sauna.
Yo encontré el Pacific Tradewinds Hostel por AirBnB. Lo puedes ver aquí. Si quieres reservarlo usando esta plataforma, utiliza mi código para registrarte y llévate 35 euros de regalo en tu primera reserva. 35 euros totalmente gratis para reservar en EE.UU. o en el país que tu quieras. Mi código es www.airbnb.es/c/cristinae52.
En este hostel dormí en una habitación de seis personas (chicos y chicas mezclados, no hay habitaciones solo para chicas que yo sepa) y ningún problema. Eso sí, es un hostel muy familiar en el que no hay cerraduras en los cuartos. De hecho, ellos lo dicen claro en sus anuncios: este es un hostel para socalizar. Osea que, si quieres hacer amigos, ir de paseo por ahí o salir de fiesta, este es un sitio ideal. Yo estuve allí en Halloween y sí, salimos un ratín (y más de uno bebió mas de la cuenta… Para desgracia de su compañero de litera). Me parece un lugar ideal para gente joven y con energía que está empezando a viajar.
No obstante, tengo que decir que en este lugar me trataron también muy bien. La sala común tiene sofás, enchufes, mesas, buena luz, etc. Es muy agradable. El WIFI funciona adecuadamente. La cocina es pequeña pero está limpia y bien equipada, y oficialmente siempre hay pan, mermelada y mantequilla de cacahuete gratis para los huéspedes, a cualquier hora (digo oficialmente porque, en la realidad, no hubiera habido pan suficiente para todos si a todos nos hubiera dado por madrugar para desayunar). También hay noodels gratis para todos, que es una mierda nutricionalmente, pero un detallazo por parte del hostel. Lo mismo lo de tener té para los huéspedes 24 horas al día. Ya te digo que majos son un rato 🙂
Los baños están bien, pero son pocos retretes (uno en mi piso) y duchas (solo 2) para un total de mínimo 12 personas que estábamos en mi planta. Cierto es que si les pides te dejan utilizar otros baños (no sé cuales porque yo nunca les pedí). Con todo, este es un sitio familiar y muy de mochileros, muy muy de mochileros más jóvenes que mayores, donde de nuevo hay un equipo de voluntarios -la mayoría trabaja en el hostel a cambio de alojamiento en San Francisco- muy amable y servicial. Si te gusta este rollo, no lo descartes.
Casa Loma Hostel (desde 62€ noche)
Según Google, en San Francisco “los hoteles de 3 estrellas tienen un precio medio de 159 euros y los de cinco estrellas de 414 euros”. Por eso, si estás buscando un hotel y no un hostel, si en San Francisco quieres dormir en un alojamiento barato pero agradable y limpio, con privacidad, en buena zona, rodeado de servicios y en el que se pueda aparcar el coche gratuitamente, echa un ojo al Casa Loma Hotel.
El Casa Loma Hotel está ubicado entre Fillmore District y Hayes Valley, a solo dos calles de las famosas Painted Ladies que salían en Padres Forzosos (las casitas de la próxima foto). La zona es segura y muy agradable, y está repleta de servicios (restaurantes de todos los países que se te ocurran, tiendecillas, lavanderías, cafeterías, paradas de transporte público, etc.). Incluso tiene un parque cerca llamado Alamo Square Park. A mi esta zona me encantó.
No solo tiene de todo, además la sentí supersegura. Sus precios empiezan en 62 euros por noche para una o para dos personas (si vais dos, cada uno tendréis que pagar 31 euros, ¡como en un hostel pero en una habitación privada con baño propio!). Ojo con sus precios, fluctúan en función de la oferta y la demanda. Si encuentras una oferta que te interese, ¡resérvala porque puede volar!
El Casa Loma Hotel está en una calle en cuesta de casitas de pocas alturas, una calle típica de San Francisco. De hecho, el mismo hotel es una “casa típica de San Francisco”. Tiene pocas alturas (tres pisos, si no recuerdo mal), y habitaciones cómodas y coquetas, no muy grandes y calentitas. El baño está dentro de la habitación, así que tendrás baño totalmente privado durante tu estancia. Aunque el hotel no sirve desayunos, en el lobby hay una máquina encendida 24 horas para puedas coger té, café o chocolate, cuantos quieras cuando quieras.
DÓNDE APARCAR EL COCHE EN SAN FRANCISCO
¿Vas a hacer un viaje con coche a San Francisco? Si es el caso, ten esto en cuenta antes de reservar alojamiento porque el parking en San Francisco puede ser gratuito o insultantemente caro. En el caso de que te decidas por el Casa Loma Hotel, que sepas que alrededor del hotel puedes aparcar de forma totalmente gratuita. Eso sí, ¡mira bien los carteles antes de aparcar!
La forma de aparcar gratis en San Francisco, en este barrio y en muchos otros, es hacerlo cuando se puede donde se puede. Fíjate que cada calle tiene unas placas tipo señal de tráfico que indican su “política de estacionamiento” (placas como la de la imagen de debajo de este párrafo). Verás que en muchas pone “No parking” y, acto seguido, cuándo no puedes aparcar y por qué. En el caso de la placa que viene bajo estas líneas, puedes leer “No Parking. 12 NOON to 2 PM FRIDAY. Street swepping”. Eso significa que no puedes aparcar en esa calle de doce del medio día a dos de la tarde los viernes porque a esa hora limpian. El resto del tiempo sí que puedes aparcar.
También hay placas que permiten el estacionamiento por dos horas -como, por ejemplo, la placa de la calle del Casa Loma Hotel cuando yo lo visité a finales de 2019-. Esas calles te valen para un ratito de dos horas PAGANDO, ¡o para las dos últimas horas de parkímetro (pagando) y después toda la noche (sin pagar)! Finalmente, hay placas que dicen que ahí no se puede aparcar nunca. Como dice la placa, ahí no aparques nunca.
A primera vista aparcar en San Francisco puede parecer un lío, pero no lo es tanto. Solo es cuestión de ir atento a cada calle y estacionar en la que proceda. Si no, siempre puedes meter el coche en un parking. Ahora, meter el coche en un parking no es gratis. ¿Y para llevar las maletas al Casa Loma Hotel? Para llevar las maletas al Casa Loma Hotel hay dos plazas “libres” justo en frente del hotel. No son plazas de aparcamiento permanente, son plazas para que los huéspedes -como tú- puedan aparcar, hacer el check in cómodamente, y después ya ir a estacionar su vehículo de forma apropiada. Si te hospedas aquí, ¡utilízalas cuando llegues sin miedo!
SOBRE LA GENTE SIN HOGAR EN SAN FRANCISCO
Hasta aquí te he contado todo lo que puedo contarte sobre dónde dormir barato y seguro en San Francisco, y sobre los hostels y hoteles que yo utilicé durante mi tiempo en esta ciudad. Desde un punto de vista práctico, no necesitas que te cuente nada más. Sin embargo, no quiero cerrar este artículo sin hablar de The Tenderloin y la gente sin hogar de San Francisco, porque es una realidad que está ahí y vas a ver. Es algo que a mi, personalmente, me impactó muchísimo.
En San Francisco hay 17.595 personas sin hogar, según datos de noviembre de 2019 publicados por el New York Times. Estas personas sin hogar o homeless (la traducción literal de homeless es sin casa) viven en las calles, en condiciones penosas, soportando las inclemencias del clima y otras calamidades. En muchos casos tienen problemas mentales, de adicciones o los dos, y aunque no tienen porque se peligrosas (de hecho, seguro que muchas no lo son), a cualquiera que no esté acostumbrado a esta situación probablemente le provoque algo entre pena y miedo ver a la gente sin hogar de San Francisco. A las decenas o cientos de personas sin hogar instaladas en las mismas calles de San Francisco. Porque en San Francisco no te encuentras un vagabundo en una acera, te encuentras 20, 30, 60 vagabundos en la misma acera.
En San Francisco existen barrios con mucha gente sin hogar (como The Tenderloin), y barrios en los que no se ve ninguna persona sin hogar (como Fillmore District). Pero resulta especialmente llamativo como los centros de ciudades como San Francisco, pero también Los Ángeles e incluso, en menor medida, Honolulu, se llenan de homeless a partir de las seis de la tarde, al caer la noche, cuando la gente termina de trabajar y los edificios de oficinas quedan vacíos. Y seguro que no son peligrosos, no por no tener hogar la gente es necesariamente peligrosas, pero a mi me daba mucho respeto y, por qué no decirlo, mucho miedo ir por las zonas llenas de homeless, hasta el punto de evitarlas aunque eso implicara no pasar por un sitio, cambiar de calle o no salir de casa de noche. A mi, San Francisco de noche no me daba ninguna seguridad. Insisto, a mi. E insisto, fue mi sensación.
Pero, ¿por qué hay tanta gente sin hogar en San Francisco? En el caso de San Francisco se juntan varios factores. Por un lado San Francisco es una de las ciudades más ricas de EE.UU.; por otro, con unos 884.000 habitantes, es una de las ciudades más densamente pobladas del país. Simplificando mucho, en San Francisco quiere vivir mucha gente pero ya no hay habitaciones ni casas para todos, y como mucha gente -que no toda- tiene mucho dinero, el precio de las habitaciones y las casas está disparado.
De esta manera, la gente con menos recursos -ya no hablo de homeless, hablo de clase obrera y clase media- se queda sin acceso a una vivienda (sea habitación o sea apartamento) o, en el caso de acceder a ella, vive en pánico porque la echen de la misma (hasta un punto que no he visto en otro lugar del mundo, esto también me llamó mucho la atención). San Francisco tiene un problema de vivienda que ríete tu de Barcelona.
Volviendo al tema de los homeless o gente sin hogar y de por qué hay tantos en San Francisco, además del precio de los pisos influye el buen tiempo -en la Costa Oeste el tiempo es más agradable que en otras regiones del país-, y las políticas del estado de California frente a la gente sin hogar, mucho más permisivas y menos hostiles que las de otros estados de EE.UU.
Es importante hacer notar que el tema del aumento de vagabundos no es exclusivo de San Francisco. Las poblaciones de gente sin hogar se están incrementando alarmantemente en casi todas las ciudades de California (en San Francisco, en Los Ángeles, en San Diego, etc.) No es que en California traten bien a los sin techo, pero al menos no les criminalizan y les expulsan de forma tan brutal como en otros lugares.
Con todo, nadie parece preocuparse de la gente en situación de calle. Y mucha gente en situación de calle acaba enfermando. No hace falta ser psiquiatra para darse cuanta de que muchas de estas personas sin hogar tienen problemas mentales, lo que da mucha pena y mucho miedo (por lo menos a mi). Si viajas a San Francisco, casi seguro verás vagabundos gritando (en un inglés a veces ininteligible) a ti, a otro, a una papelera o al aire mientras el mundo baja la mirada y les esquiva, literalmente.
EL BARRIO DE TENDERLOIN (EN LA HISTORIA Y LA ACTUALIDAD)
El caso de The Tenderloin, el barrio de San Francisco que se lleva la palma en cuestión de homeless y mala fama, es bastante especial. Este céntrico lugar en el que es muy fácil meterse si una no va atenta, ha sido un barrio tradicionalmente obrero, un lugar en el que se hospedaban muchos hombres y mujeres que a principios del siglo XX se desplazaban a San Francisco para trabajar. Vivían en una especie de hoteles o residencias de SROs (single-room ocupancy) donde uno podía alquilar una habitación sin cocina propia por largas temporadas.
Al calor de esta solución habitacional nacieron tiendas, bares, etc. Servicios para los recién llegados. Pronto The Tenerloin se convirtió en un animado barrio lleno de solteros y solteras jóvenes que querían trabajar y divertirse y, al mismo tiempo, en el foco de la ira de muchos conservadores que no veían con buenos ojos que tantos solteros y, sobre todo, solteras se lo pasaran bien hasta altas horas de la madrugada y que vivieran su vida con relativa libertad. A estos barrios llegaron el jazz y los bailes, pero también el juego, la droga, la prostitución y sus respectivas mafias, estando en muchos casos la policía implicada en el desarrollo de las actividades delictivas.
Y así fue pasando la vida en San Francisco, y en The Tenderloin fueron pasando muchas cosas, buenas y malas. Desde grandes artístas y boxeadores, hasta enormes activistas por los derechos de las mujeres, los homosexuales y otros colectivos discriminados. A día de hoy, The Tenderloin es el último bastión de la gente con menos recursos económicos de San Francisco, y en él todavía se pueden encontrar ‘hoteles’ que dan soluciones habitacionales baratas a los habitantes de la ciudad.
Asimismo, se quiere recuperar el barrio como barrio alternativo y muchas son las iniciativas para reavivarlo culturalmente. Desde museos hasta restaurantes, pasando por bares, graffitis y tours para touristas que intentan explicar la compleja realidad del barrio y la ciudad.
ENTONCES, ¿SE PUEDE VISITAR EL BARRIO THE TENDERLOIN?
Si, poder puedes visitar the Tenderloin. Ahí está. Nadie te va a prohibir la entrada.
Yo no me atreví a ir sola a The Tenderloin, ni de día ni por supuesto de noche. A lo más que llegué sola es a su mercado de furtas y verduras (el Heart of the City Farmers’ Market abierto miércoles, viernes y domingos). El mercado fantástico, unas frutas buenísimas y unos precios geniales. Pero ya. El resto del barrio me daba mucho respeto, en parte porque no sabía exactamente que esperar, en parte porque desde su frontera en la avenida Van Ness podía ver claramente tiendas de campaña y un montón de gente desaliñada que me daba de todo menos seguridad.
A pesar de esto, me moría de curiosidad por ver lo que yo consideraba el Tenderloin de verdad, quería saber si era tan peligroso y tan horrible como me habían contado. Pero, sobre todo, quería saber más sobre esos homeless, sobre esa gente que está en la calle y que a mi no me cabe en la cabeza ni cómo puede estar ahí, ni cómo ha llegado hasta ahí, ni mucho menos cómo puede uno de los países más ricos del mundo tener tantísima gente en la calle sin preocuparse lo más mínimo. No me interesaba ver el barrio de Tenderloin en sí, me interesaba saber más sobre esa gente marginada que vive en sus calles.
Tampoco pensaba que el barrio fuera tan peligroso, pero claro, una se va haciendo mayor y las ganas de hacerse la valiente y de meterse en sitios donde no se tiene que meter son cada vez más pequeñas. A estas alturas de la vida, tonterías las justas, especialmente si estás en un país como EE.UU. donde hacerse con un arma es bastante sencillo.
Así que buscando formas de aprender y conocer más sobre la problemática de la gente sin hogar y sobre The Tenderloin, encontré un museo sobre el barrio que hacía tours guiados por la zona. El Tenderloin Museum se encuentra en la confluencia de las calles Eddy Street y Leavenworths Street. Hasta él llegue acompañada de un amigo que hice en el hostel donde me quedada. Una amigo alto, fuerte y americano. Yo no me atrevía a ir sola y, aún acompañada, no me atreví a llevar ni móvil ni cámara ni bolso (lo que probablemente fue un exagerado por mi parte, pero es la verdad).
¿Qué me pareció el barrio de Tenderloin? Pues hombre, desde luego que no es el sitio que elegiría yo ni para pasar unas vacaciones ni para criar a mis hijos. Está sucio y descuidado, lleno de personas sin hogar, drogadictos y vagabundos. No me atracaron ni me mataron, ni siquiera me ofrecieron droga, pero ni el barrio ni el ambiente me gustó. Lo pasé fatal, hasta el punto de que quería hacer una de las visitas guiadas por la zona y no me atreví. Preferí quedarme dentro del museo y enterarme de la historia del barrio segura, calentita y tranquila.
Pero, por supuesto, esto es mi opinión personal. Durante mi viaje conocí a gente que se hospedó en The Tenderloin (porque no sabía dónde se metía. Simplemente vió un alojamiento barato en San Francisco y pensó “mira que bien, voy a reservarlo”). Para evitar caminar por sus calles de noche, lo que hacían era coger un taxi hasta la puerta de su alojamiento y punto. Lo mismo si querían ir a algún bar en esa zona. Taxi para arriba, taxi para abajo, y todo arreglado. Yo, siendo sincera, no iría ni en taxi. Nunca me quedaría a dormir ahí ni iría a sus bares salvo que tuviera un interés extremo en hacerlo (como probablemente tendrán los amantes del jazz que recalen en esta ciudad).
Como curiosidad, el nombre del barrio (Tenderloin) viene de la pieza de carne con el mismo nombre, una pieza de carne considerada de gran calidad y, por ello, más cara que otras. Según se explica en el Tenderloin Museum, en 1876 el capitán de la Policía de Nueva York Alexander S. ‘Clubber’ Williams puso el apodo de tenderloins a aquellos barrios de las ciudades donde el crimen y el vicio eran la norma.
El capitán esperaba percibir tantos sobornos a cambio de dar protección o permitir la actividad de los negocios de dudosa legalidad o directamente ilegales de esos tenderloins que bromeó sobre como, a partir de entonces, tendría tanto dinero que podría dejar de comer filetes normales y corrientes para por fin poder comer tenderloins. Bromas a parte, el Tenderloin de San Francisco se considera el último de Estados Unidos. Aunque es poco recomendable para dormir y pasear, su historia de vida y resistencia resulta fascinante.
Sígueme en Facebook e Instagram
SI TE HA INTERESADO ESTE ARTÍCULO, QUIZÁ TE INTERESE…
Alojamiento en Hawái, dónde barato en Oahu, Big Island, Maui y Kauai
20 cosas que yo hice en Nueva York (casi todas gratis)
- Regístrate en AirbnB usando el link www.airbnb.es/c/cristinae52 o el código cristinae52 y llévate hasta 35 euros gratis para tus reservas (válido para reservas de AirBnB en San Francisco o en cualquier otra sitio del mundo).
- Consigue 5 euros gratis al encargar tu targeta BNEXT (una de las tarjetas sin comisiones que yo use durante mi viaje por California).
- Compra aquí tu guía Lonely Planet de la Costa Oeste de EE.UU.
Hola, estoy en San Francisco y me gusta caminar y perderme cada vez que voy a algún lugar y esta vez hice eso y sin querer fui a ese lugar, tenía tanto miedo no sabía dónde estaba metida y caminaba para poder salir y me seguía metiendo cada vez más, tuve que pedir ayuda
Vaya, lo siento. Espero que todo acabara bien. ¡Seguro que sí1