Cuentan que el emperador Carlos V gustaba en sus años mozos de visitar la coqueta localidad de Oudenaarde, un agradable enclave ciclista en el corazón de las Arenas Flamencas. A su alteza, como a todo buen español, le encantaba comer y beber con los amigotes en los amplios salones del palacio que hoy hace las veces de ayuntamiento y, muy […]
¿Por qué lleva gafas el escudo de Oudenaarde?
