10 regalos para viajeros (o gente a la que ya no sabes qué regalar)

Confiesa: temes que se te eche el tiempo encima, no tienes un duro y sabes que tu imaginación planea tomarse vacaciones por Navidad (vamos, como todos los años). Si vas a dejarte llevar por la espiral consumista que envuelve las fiesta (tienes que hacerlo, ¿cómo no?), por lo menos no obsequies ‘lo de siempre’. Ahí van 10 ideas útiles y económicas ordenadas de más barata a más cara (la más cara no supera los 70 euros). Espero que alguna te sirva.

BATERÍA PORTATIL PARA MÓVIL. La única manera de que tu móvil no te deje tirado en el momento menos pensado es tener cargada y a mano una batería portátil que se le puedas enchufar. Las hay de todos los tamaños, colores y precios, pero todas tienen algo en común: ¡energía! Viajeros y adictos al whatsapp en general sabrán apreciar bien este regalo. Precio: 4,75 euros. A mayor carga de batería, mayor precio.

UN PALO. Para ser exactos “un palo por el culo, el regalo que expresará exactamente lo que quieres decir” a esa persona “especial”, según la web que los vende. Tu palo o palos (¡puedes enviar cuantos quieras!) serán enviados con la siguiente nota: “Hola. Alguien ha querido hacerte llegar este precioso palo. Estamos muy contentos de poder entregártelo y deseamos que disfrutes con él. Queremos aprovechar para desearte… ¡Un buen día! Nota: El uso y disfrute que le des al mismo correrá bajo tu entera responsabilidad”. El envío es anonimo, aunque seguro que si quieres puedes firmarlo. PRECIO: 9,90 euros.

UNOS GUANTES CON USB. ¿Para qué querría un viajero o un no viajero unos guantes con USB? Muy fácil, para enchufarlos al ordenador y que le calienten las manos. Yo los tengo y son lo más. Me mantienen las manos calientes mientras escribo en casa o en el tren. La ‘parte que calienta’ y los guantes (tipo mintones) son independientes. La primera se recubre con la segunda. De hecho, puedes recubrir tu ‘parte que calienta’ con los mitones que quieras e ir conjuntado. PRECIO: 13 euros. (* Nota: también hay calentadores de tazas con USB y zapatillas calentadoras USB, esas no las he probado todavía).

UNA SÁBANA-SACO. Esto es un bombazo que descubrí viajando por Tailandia. La sabana saco es, como su nombre indica, una sabanita fina en la que te puedes meter como si fuera un saco, o sobre la que te puedes tumbar si hace mucho calor sin necesidad de entrar en contacto con las sábanas de tu hostel (si es que tu hostel tiene sábanas). Superrecomendable para mochileros low cost. PRECIO: 14,95 euros.

UNA HAMACA. Regalar una hamaca es regalar horas y horas de felicidad. De hecho, nadie sabe realmente lo que significa la palabra ‘felicidad’ hasta que se ha subido a una hamaca. Si crees que me equivoco es que nunca has subido en una (¿verdad?). Hay hamacas para tumbarte (necesitan dos enganches) y hamacas para sentarte (vale con un enganche), y las dos pueden ser colocadas en interiores. Sirven para la gente vaga, para la gente que lee, para la gente que trabaja, para la gente que toma el sol… ¡Y no tiene límite de edad! Yo no sabría vivir sin la mía. PRECIO: desde 15 euros, aunque yo no me fiaría mucho de una hamaca de 15 euros. Entre 50 – 60 euros (coste Europa) me parece un precio razonable.

UN CURSO DE FOTOGRAFÍA. Ideal para esa persona a la que el año pasado los Reyes le trajeron una cámara y aún no tienen ni la más remota idea de cómo usarla. Existen miles de cursos de fotografía pero a mi me gustan los de Ainara García, una fotógrafa con la que yo he aprendido muchísimo (es la chica del video). Calidad a buen precio con la ventaja de que pueden hacerse por Internet, a deshora y con una profesora-tutora a tú disposición para corregir prácticas, preguntarle dudas, comentarle sensaciones, etc. En la actualidad tiene cursos de fotografía de viajes y cursos de fotografía en modo manual. Si los quieres para regalo te manda un cupón que es una pocholada. PECIO: 15 y 19 euros, respectivamente. Si eres lector de este blog introduce el código ‘mochila’ y tendrás un 5% de descuento.

UN AURICULAR MANOS LIBRES. Otro inventazo sin el que yo ya no querría vivir. Un auricular manos libres que se conecta por bluetooth al movil o al ordenador para que puedas hablar sin perder las manos. Para estar al ordenador, para cocinar, para hacer deporte, para recoger la casa mientras te pones al día con tu amigo de no se donde… ¡Vale para todo! La batería en uso dura como 11 horas (seguro que antes se te acaba la batería del móvil o del ordenador). PRECIO: 22,56 euros.

UN LIBRO. Un libro lo tiene todo: es guay, vale para todo el mundo y su precio es aceptable. Solo hace falta dar con ‘EL LIBRO’, ya que no vale cualquier libro para cualquier persona. Si no se te ocurre nada, a mi me encantaron Ébano (crónicas africanas de lo cotidiano), Bajo los cielos de Asia (honestas vivencias de un himalayista), y Si esto es un hombre (un prisionero de Auschwitz cuenta cómo sobrevivió). Específicamente para viajeros me gusta Cómo preparar un gran viaje, un manual muy completo que encuentra una suerte de versión femenina en Viajeras; y para quienes quieran reirse Jesús me Ama (de cómo una mujer acaba bailando salsa con Jesucristo). Tienes más sugerencias de libros en siete libros para siete destinos y seis libros que dan ganas de viajar. ¿O qué tal una revista llena de fotos bonitas? Las National Geographic están a 24,95 euros al año (12 revistas, 3 DVDs,  2 números especiales y un mapamundi). PRECIO: varía en función del tipo de libro que compres.

UN GASTROJARDÍN. Con gastrojardín podrás echarle a tus comidas plantas aromáticas que tu mismo hayas cultivado. Perejil, cebollino, eneldo, stevia, albahaca, cilantro, tomillo, orégano, mejorana… Tú eliges las semillas, ellos te las mandan para que las plantes en las macetas de fibra natural biodegradable que te envían y las metas en una bonita caja de pino de madera natural que te mandan también. Para que todo vaya bien, tu kit incluye “sustrato universal enriquecido con humus de lombriz” y, para que no se te olvide qué plantaste en donde, cuatro cartelitos. Me dirás que no es mono. PRECIO: 29,95 euros. Hay productos similares en el mercado por menos dinero, pero estos señores me parecen tan ecológicamente entrañables que yo se lo compraría a ellos (en su momento les compré uno para regalo).

UN VUELO EN PARAPENTE. Emocionante y seguro (dentro de que estas volando). Un vuelo en parapente es algo que no se olvida fácilmente, un capricho que uno no se permite todos los días. Es la experiencia perfecta para dejar el listón muy alto. De hecho, lo único que puede superar esto en altura es un salto en paracaídas o un viaje al Estación Espacial Internacional. Apto para casi todas las edades. PRECIO: 70 euros (orientativo. Esto es lo que cuesta un vuelo biplaza con monitor en la escuela Parapente Sopelana). En páginas tipo Groupon puedes encontrarlos por menos.

¿No te convence ninguno de los regalos? ¿No te llega ni para el cargador de batería? ¿Quieres algo realmente inesperado que deje a su receptor con la boca abierta? Entonces compra la piña más grande de la frutería y envuélvela. ¡Eso seguro que no se lo espera! Si le recortas unos ojos y una boca ya lo acaba de flipar. Regalo y postre sano sin casi calorías, ¿quién da más? Al fin y al cabo, estas fiestas van de sacar una sornisa a la gente que quieres, no de gastar por gastar. Por lo menos así es como vivimos en mi casa la Navidad.

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